Dice Pedro Sánchez en unas declaraciones a la prensa, en el contexto de la reunión de mandatarios de la UE sobre lo que está sucediendo en Gaza, que condena a Hamas y que le exige que libere sin condiciones a las personas secuestradas, y por otro lado que Israel tiene derecho a defenderse, pero siempre dentro del derecho humanitario (sic). Bien, analicemos si esto es una postura equilibrada y si está midiendo con la misma vara las actuaciones de ambas partes.
Por un lado tenemos que Hamas ha matado a un número de israelíes y que Israel ha matado y sigue matando a un número de palestinos. Obviemos (¡que ya es mucho obviar!) cuántos ha matado o está matando cada bando.
Si ambos están haciendo cosas deplorables, cabría aplicar la terminología que ha usado Sánchez de manera intercambiable. Así pues, podría haber dicho el presidente español lo siguiente: «El gobierno español condena los ataques de Israel a la población civil palestina y le exige que los detenga inmediatamente y sin condiciones, y entiende que el pueblo palestino tiene derecho a defenderse de quienes invadieron y ocupan sus tierras, pero siempre dentro del derecho internacional». Sin embargo, tal declaración parece bastante poco probable, lo cual nos lleva a la inevitable conclusión lógica de que el presidente español mide las barbaries con diferente vara de medir, según de dónde vengan.