- tr. Poner a alguien o algo en lugar de otra persona o cosa.
- tr. Dicho de una persona o una cosa: Ocupar el lugar de otra.
- tr. Suplir a alguien o hacer sus veces.
Las llamadas energías renovables no pueden ponerse «en lugar de» los combustibles fósiles en un número importante de usos, ni «ocupar» su lugar, empezando por la petroquímica y terminando por los motores de numerosos vehículos pesados. Tampoco pueden «suplirlos» ni «hacer sus veces» en dichos usos, y sobre todo en la escala necesaria. A lo sumo cabría decir que pueden intentar sustituirlos parcial y temporalmente, puesto que estos sistema tecnológicos modernos, no lo olvidemos, son absolutamente dependientes de la energía fósil para su construcción y funcionamiento, y son por tanto pseudorrenovables (otra mentira dentro de la gran mentira de la sustitución energética).