Dice alguna gente que el ingenio humano es capaz de aportarnos tecnologías que nos saquen del atolladero histórico en el que estamos, de evitar el colapso civilizatorio. Pero miles de años de ingenio humano ya han producido aquellas tecnologías con las que sabíamos vivir sin energía fósil, antes de la invención de la máquina de Watt. O sea, que apelar a nuevos frutos maravillosos de la creatividad humana está un poco de sobra… No necesitamos nuevas tecnologías para aprender a vivir sin petróleo, sin gas natural, sin carbón o sin uranio. En realidad, no es un problema de falta de tecnologías, sino de cambio de modelo cultural y de valores.
Por otro lado el ingenio humano también ha producido (y aun seguirá un tiempo produciendo) tecnologías que permitirían eludir ese cambio cultural necesario, destruyendo a buena parte de la humanidad y del planeta, para salvar (?) sólo a unos pocos.
Tengamos ambos aspectos del ingenio humano en cuenta cuando apelemos a él para el cambio civilizatorio.