¿Es sólo impresión mía o el felicitar está acabando con el dar la enhorabuena? Hay situaciones que sí que pueden resultar ambiguas y uno/a no saber muy bien qué decir… pero hoy en el Metro de Bilbao ha asistido a una de las ocasiones en que queda tremendamente ridículo decir ¡Felicidades!. El caso es que iban dos chicas sentadas en frente de mí, probablemente hermanas. Una de ellas, hablando por el teléfono celular (¡odio eso de móvil! ¡si no se mueven más que para vibrar …y eso ni siquiera todos!) con un chico, le contaba que la otra había aprobado un examen (Estadística, para más señas). Una vez enterado el interlocutor telefónico, ella le trasmitió lo que él le decía: «Oye, dice X que felicidades…». ¿Desde cuándo se dice felicidades cuando uno aprueba un examen? ¡Lo que hay que dar es la enhorabuena! …Como cuando nace un hijo o cualquier otro feliz acontecimiento (como el acontecimiento ya es feliz de por sí, es absurdo desear felicidades). Las felicidades se desean y la enhorabuena se da cuando ya ha sucedido algo feliz o simplemente bueno. Las felicidades son para ocasiones más o menos fijas, como cumpleaños, fiestas, conmemoraciones, aniversarios y similares. Pero la gente desde hace unos años, sobre todo los jóvenes, están confundiendo estos dos tipos de situaciones.
Bueno, es que la palabra «enhorabuena» probablemente la conozcan sólo los habitantes de la península ibérica y algunos que otros en algún país de América. Mientras que «felicidades»/»felicitaciones» las conocemos todos. Es lo que tiene este idioma, su variedad.
El nombre en España es teléfono móvil, no celular (usado en America Latina). Y claro que se mueve, a diferencia de las líneas fijas, que siempre se encuentran en la misma ubicación
No es que no se mueva (por cierto: los teléfonos «fijos» también se pueden mover, a no ser que estén atornillados a la pared, algo ya poco habitual… sobre todo los llamados «inalámbricos»), sino que los aparatos que se pueden portar mientras funcionan se han llamado toda la vida «portátiles». Y sí, en los primeros tiempos aquí se llamó también celular, hasta que Telefónica impuso comercialmente el término móvil porque les convenía (su marca era Moviline, luego Movistar).
La palabra celular es incorrecta. Es una mala traducción del inglés «cell phone», la traducción correcta debería ser «telefonía de celdas» y no celular, ahí las células no pintan nada. Aún así, los ingenieros de telecomunicaciones de Telefónica, Movistar, por influencia sudamericana, siguen diciendo «células» en vez de «celdas», algo que no gusta nada al resto de ingenieros de telecomunicaciones. En España, la telefonía móvil se transmite por celdas y al teléfono se le llama móvil, que es la traducción correcta, pues «cell», en inglés, es un ejemplo de homonimia.
Interesante. Nunca lo había pensado así y yo siempre he sido un defensor de la terminología «celular». ¿Podrías explicar por qué son celdas y no células? ¿Es porque la analogía es con las celdas de los panales?
Además, si te dijas, el diccionario de la RAE considera célula como sinónimo de celdilla: http://dle.rae.es/?id=8B5hd4v